Una fosa séptica tiene como función evitar la contaminación del agua potable, eliminar los malos olores y evitar enfermedades bacteriales. Se trata de una estructura cilíndrica, puede ser de concreto, de polietileno o de fibra de vidrio. Divida en dos o más compartimentos, las clásicas cuentan con dos compartimentos llamados: cámara de biodigestión y tanque de efluente.
Toda fosa séptica requiere de un correcto cuidado, para lograr así su buen estado y funcionamiento. Alargando su vida. Hay empresas que recomiendan realizar un mantenimiento periódico, otras cada dos a cinco años. Esto depende del uso dado a la fosa y del número de integrantes de la vivienda. Este mantenimiento consiste en un vaciado y posterior limpieza del tanque séptico.
Se debe proceder al vaciado de la fosa cuando su carga esté a la mitad. El vaciado de fosas sépticas es un mantenimiento necesario cuando se acumulan en el fondo: grasas y lodos. Nunca contrates personas no especializadas en tareas de vaciado de fosas sépticas y menos intentar realzar por tu propia cuenta esta tarea, ya que puede resultar ser muy peligrosa además de difícil, si no cuentas con los conocimientos necesarios.
Es recomendable siempre supervisar la cantidad de agua que fluye en la fosa de forma diaria. Cuando el pozo séptico se encuentre a mitad de carga, se debe recurrir a su vaciado.
Fosas sépticas Torroella de Montgrí
Se recomienda abrir lentamente la tapa para expulsar los gases que se encuentran en la cámara de aire. Estos gases son producidos por la fermentación de materias fecales y lodo. Son altamente tóxicos e inflamables, por eso es recomendable abrir poco a poco las tapas, evitando respirar estos gases ya que pueden provocar desmayos y accidentes. Por eso se debe no fumar, estando cerca de una fosa séptica abierta. El gas metano generado por la fermentación puede generar una explosión.
Colocar la bomba aspiradora.
Colocar la manguera aspiradora en el lado de las aguas servidas, en su salida, sin tocar el fondo, al nivel del agua para que aspire primero la capa superficial, para no absorber los lodos de fondo de la fosa séptica. Se debe limpiar y retirar la primera capa de residuos y lodos.
Colocar la manguera de agua.
Se debe colocar la manguera de agua para que la fosa séptica se llene de agua clara, eliminándose los desechos. El flujo del agua no debe ser superior a la cantidad de lodo eliminada. Se deben limpiar los filtros con agua a presión.
Pasos finales.
Cuando el nivel de lodo aspirado es de un 80% del lodo existente, hay que dejar de aspirar, dejando un 20% de lodo para reanudar las tareas de depuración, antes habrá que rellenar el resto con agua limpia. Por último añadir una dosis indicada de activador bacteriano.
Cerrar tapas de la fosa séptica.
Por último hay que cerrar las tapas de la fosa séptica, verificando que las mismas no puedan abrirse con facilidad. Tener presente que abrir una fosa séptica de forma incorrecta puede ocasionar asfixia o peor la muerte, debido a la peligrosidad de los gases emitidos, los cuales son tóxicos e inflamables.
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